viernes, 26 de abril de 2024

NI GÜENOS NI MALOS

La superioridad moral es la cosa que más asco me produce, la jente en general se piensa que el hecho de declararse de izquierdas le sirve para mirar por encima del hombro al resto.

Las personas que se declaran de derechas ya han pasado a ser directamente criminales, tipos capaces de matar a su padre en tal de imponer la dictadura fascista.

El único argumento válido que manejan es el no pasarán, lo de ahora de Pedro Sánchez es eso exactamente, cita en la carta no menos de cuatrocientas veces “ultraderecha”, y… ¿esta cosa que es?, pues todo aquello que no me baile el agua, hasta hace cuatro días el lobo era Vox, pero como ni pinchan ni cortan, ahora la ultraderecha es todo, ultraderecha son el pepé, la prensa, la judicatura, los empresarios y hasta los cantantes argentinos a los que les gusten los toros.

Se ha declarado la alerta antifascista, anteriormente la declaró el de la coleta con resultados más bien decepcionantes, pero güeno, por intentarlo otra vez.

Hay varios conceptos que no tienen derecho a manejar las gentes conservadoras… democracia, derechos, progreso, justicia, paz…. Esas cosas tan solo son capaces de defender y llevar adelante iluminados como los defensores de la República… origen de todo mal en mi modesta opinión.

Los perdedores de la guerra civil idealizaron tantísimo la puta república que han acabao convencidos de que es lo único que nos podría salvar… y como el viejo duró tantísimos años, pues cuanto más tiempo pasaba más se emparanoiaban y más la idealizaban.

Vayamos con la realidá… la II República fue un absoluto kaos, un despropósito, TODAS las organizaciones de izquierdas y TODOS los separatistas incumplieron la legalidá desde el minuto uno… eran sus santos kojones lo único que valía, y el Frente Popular tenía de democrático y de republicano lo que mis kojones… pura propaganda de cara al exterior, romantizada por escritores yankees y poetas despistados.

¿Sabe alguien quién fue Margarita Nelken?... musa de la República, libertaria que te cagas, ejemplo de demócrata… pos bien, entre otras cositas, la feminista esta fue la encargada de mostrar la auténtica cara de los zurdos republicanos.

Durante el asedio del Alcázar de Toledo por parte de milizianos del Frente Popular y de los guardias de asalto, el embajador de Chile se ofreció a sacar de allí dentro a las mujeres y a los niños pa llevarlos a Madrí donde quedarían protejidos por el cuerpo diplomático… los rojos se niegan…. Cuando estaban comentando la oportunidá perdida con el embajador noruego, llegó hasta ellos una tiparraca encendida, una roja concienciada chillando como una loca… era la Margarita, en ese momento diputada socialista, pero que más tarde se pasaría al partido comunista… la puta loca clamaba a gritos que, por encima de todo, había que eliminar, dejándose de sentimentalismos, a las mujeres e hijos de esos canallas del Alcázar. ¡Lo que había que desarraigar para siempre era precisamente la nidada, el engendro, la semilla de esa canalla! … el público allí presente estalló en aplausos…. ¿les suena el argumento?... no hay que dejar ni uno que aluego crecen…

Efecto o ilusión Thatcher - Las dos caras son exactamente iguales (clic para más info.)

No creo que lleguemos en esta España del siglo XXI a desencadenar otra guerra civil, pero tampoco lo descarto, ya no hay confrontación de ideas ni de programas, el campo se ha embarrado de tal forma que es o conmigo o contra mí, el que no me apoye es enemigo a eliminar… todo se ha reducido a un par de aficiones enfrentadas, como en el Fútbol … otra vez rojos contra azules, este movimiento del Presidente ha sido lo que faltaba, un prietas las filas y otra vez un No Pasarán, lo jodido es que sí que pasan y mientras van pasando millones irán palmando.

No veo a nadie capaz de parar la deriva, de detener de alguna manera el despropósito… ya ni las urnas son garantes de nada y el Rey no deja de ser un monigote maniatado…. ¿Uropa nos salvará?... pos igual sí, de momento y pa este finde, el Frente Popular llama a la Movilización General, movilización que tendrá su respuesta por parte de los Nazionales, que no lo dude nadie, de mientras el enamorado mirará por la ventana con media sonrisa mientras acaricia al gato.

A lo que iba, que ni güenos ni malos, que en cualquier opción política hay gente legal y gentuza execrable, que hay que huir de maximalismos como el que se nos plantea, que hay que intentar recuperar el sentido común y legalizar la Marigüana… yo y pa dar ejemplo, esta noche pienso invitar a un chupito de Lejendario al rojo de Comisiones Obreras, Paco, el carretillero de Sidenor, que cada vez que abre la boca se la partiría, pero es que pesa cien kilos y no me atrevo… seguro que hablando conseguimos entendernos.

V I C H O

sábado, 6 de abril de 2024

YO ME HE BAJADO EN LA ÚLTIMA... ¿Y USTED?

Eso de las etapas en la vida es un lugar común del que todos hemos participado, seguro. Habremos hablado largo y tendido o en píldoras, pero algo habremos dicho todos; muy probablemente algo parecido.
Hay etapas relativas a la edad únicamente, y pasas de ser niño a ser joven, adulto y finalmente persona madura; con suerte, vieja. Hay etapas relativas al vínculo familiar, y pasas de ser hijo y hermano a ser novio, pareja, puede que padre, y después abuelo… imposible bisabuelo ya. Hay etapas relativas a la actividad, y pasas de ser estudiante a ser trabajador; y después, con suerte también, a ser jubilado. Podría hablarse de etapas relacionadas con la evolución interna, con la maduración… ahí ya no está tan claro que todos sigamos patrones comunes. Unos pasan de la rebeldía a la ortodoxia; otros de la utopía al descreimiento; algunos de la ansiedad, la prisa, la zozobra… a la calma, la aceptación, la fortaleza. Otros hacen el camino contrario… o ningún camino. Se mueren donde empezaron por obstinación o porque el recorrido no pasó por ellos, aunque ellos recorrieron kilómetros. De todo habrá en este último aspecto.

La cuestión es que solemos estar a la vez en varias de esas etapas, según cuál de ellos (de los aspectos) tengamos en cuenta, pero casi siempre las recorremos todos en el mismo sentido. Y casi siempre solemos hacer juicios genéricos muy parecidos sobre ellas, que terminan por darles incluso nombre: la flor o lo mejor de la vida; la tercera edad...

Me parece, como decía, que son lugares comunes que aceptamos por pereza o simple desinterés, sin analizar demasiado, o al menos sin tener en cuenta la cantidad de casos concretos (quizá el nuestro propio) en que ese lugar común no acaba de encajar. La juventud a toda costa tiene que considerarse la mejor etapa de la vida, un momento pletórico de fuerza, de vitalidad, de ilusión… un lugar al que la tristeza tiene vedado el paso, en el que la ansiedad es desconocida, la soledad no existe, la desesperanza es un disparate imposible. La que viene después de la jubilación no puede ser más que una resignada espera en la que el declive va acaparando espacio hasta no dejar nada que no haga suyo.

Quizá la mayoría de nosotros borramos de nuestra memoria la cantidad de sufrimientos que fueron jalonando cada uno de los tramos; cómo recoger las rosas que pudimos reunir nos costó siempre algún trabajo y hubo cardos y terrones secos, igual que hubo de vez en cuando prados verdes en los que abandonarse cuando todo apuntaba a que se perecería de sed o de cansancio.

Se nos olvida que quizá fuimos niños solitarios, niños miedosos… ¿Todos tuvimos la infancia feliz con padres ejemplares ocupándose constantemente de nosotros sin que quedara resquicio en el que pudiese anidar en nuestra alma la decepción, el anhelo de otra realidad posible? ¿Guardamos bajo llave que en la juventud hubo muchos proyectos que no vieron la luz, amores que no se materializaron, sueños que solo dieron fe de nuestra incapacidad para luchar por ellos o para atrevernos a alcanzarlos?

Si no todos los viejos se tornan más sabios, sino más hondamente lo que quiera que antes fuesen, tampoco todas las infancias y las juventudes fueron modélicas arcadias en las que nuestra vida estallaba de gozo y de plenitud. Puede que muchas vidas sean una mezcla constante de momentos memorables y momentos que olvidar, de éxitos que han ido asomando como pequeñas cimas sobre una cotidianidad más o menos llana, también sin grandes socavones… y considero que esos picos pueden estar aleatoriamente más o menos concentrados en cualquier punto de ese llano camino.


Así que del mismo modo, y quizá con más motivo (porque es ahora cuando muchas responsabilidades desaparecen, cuando el tiempo retorna a tus manos, cuando el reloj y el calendario empiezan a resultar un adorno si tú quieres), estoy convencida de que esta ‘última’ etapa puede guardar tantos posibles regalos como cualquiera de las otras, o incluso más. El plano físico irremediablemente habrá de ser cuesta abajo, pero sin duda puede verse compensado -si la salud acompaña, que la arruga no es lo grave- con lo mucho que hemos ido aprendiendo por el camino, lo mucho inútil que hemos ido dejando o nos ha dejado a nosotros, lo mucho que aún queda en cada curva del camino por descubrir, por explorar, por atreverse y por probar.

No tengo la menor depresión, la menor nostalgia, el más mínimo temor a no poder adaptarme a esta gran vida, no señor. Lo recomiendo si alguien está dudando entre parar o seguir, jeje. Párense, bájense de la vida ‘activa’ en cuanto el tranvía se lo permita y empiecen el camino… esta vez a pie, pero nunca de vuelta

z i m

— Exención de responsabilidad —
Una de las cosas que he aprendido rebién es que la entrada es una excusa 
para seguir viniendo; por favor, esfuerzos por cumplir, los mínimos... 
que nos conocemos y esto es un roto para un descosido.